lunes, 2 de enero de 2012

Cumpliendo con lo establecido

Chema Madoz

Uno de los tópicos más manidos de principios de año es repasar todo lo bueno que te aportó el pasado y hacer propósito de enmienda de todas aquellas cosas que no hiciste (bien) para el siguiente. Es un tópico manido pero, al fin y al cabo, reconforta al que escribe: de un plumazo ordenas tu vida y vuelta a empezar.

¿Será así de fácil de verdad? Me sorprende entonces lo sencillo que es a veces engañar a la conciencia. O al corazón. A las expectativas en general.


Al ritmo de ‘una décima de segundo’, de Antonio Vega, trato de hacer lo mismo con mi 2011 y  proyectar con valor 2012. Lo cierto es que nunca me ha gustado caer en ello, más que nada porque soy muy de dejar-a-medias-la-mayoría-de-las-cosas-que-empiezo, pero sobretodo creo que es un temade nostalgia (o de pánico a). Suelo echarle la culpa al tiempo por lo rápido que es cuando estás a gusto y de lo mal que se porta cuando no lo estás en absoluto. Y ya van dos. Dos tópicos y un propósito cumplido: por lo menos empezar.

Chema Madoz con una influencia
 indiscutible del surrealismo y la poesia visual
Al repasar todo, momentos y expectativas, me consuela y asusta al mismo tiempo el hecho de que un momento en una agenda pueda ser simplemente una décima de segundo más que vuela. Creo que se trata del hecho de que la arena del reloj va saltando de hoja en hoja de forma completamente arbitraria, cubriendo tiempo y espacio con mil millones de instantes de que hablar
Instantes que traducidos en tiempo presente son, muchas veces y especialmente una vez terminados, como una ráfaga de aire frio o un molino de viento que va rodando sobre su eje, descubriendo una trayectoria más. Es la vuelta de tuerca sobre lo vivido. Volver la cabeza al pasado y mirarlo con otra perspectiva no siempre es bueno: cada segundo guarda una magia especial que se completa con la animadversión de quién lo experimenta.
Sin embargo, todo esto tiene un punto positivo. La memoria no es sino un colladge que se moldea a su propio antojo creando de lo vivido una nueva obra completamente diferente. Con ciertas reminiscencias de realidad, pero contaminada por una mezcla maravillosa y perfecta que aglutina imaginación y deseo. 

Chema Madoz

Y es que no hay nada mejor que imaginar. Es cierto eso que dicen de que la física es un placer, que no hay nada mejor que formular, escuchar y oir a la vez, en este caso, todo lo que tienen que decir y nunca dijeron los fantasmas de los recuerdos que aún guardas.

Chema Madoz
En fin, que no hay nada mejor que revolver el tiempo con el café y componer sin guitarra ni papel. Mis propósitos ya están lanzados al aire y los recuerdos cosidos a mi cuerpo, no sé si servirá de algo, pero es cierto que una se siente mucho mejor. 
Como siempre y tal y como nunca dejaré de hacer, he jugado al ajedrez con el espacio-tiempo y sigue ganándome la partida. 
Reflexiones desordenadas a principio de año y un nuevo proyecto que jamás terminaré.
Feliz vuelta a empezar.

*Mi particular homenaje a Chema Madoz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario